Carne Podrida: modificaciones, retoques y falsificaciones en internet
(Por Raúl Manrupe) Ejercicio uno. Levanten la mano los que lo han hecho.
Entramos a Wikipedia. Vemos un error en una entrada. Lo corregimos,
Lo justificamos, en un espacio al pie, destinado a esta tarea. Lo enviamos. Es agregado. Compruébenlo. Entren en este link. Es la bio de Jesús Ricardo Iglesias, un corredor de autos argentino. Noten que en vez de un punto final, el artículo tiene dos. Se lo agregamos arbitrariamente.
Otro caso. Tal vez lo vieron en internet, como una noticia de la semana.
Un estudiante irlandés editó la biografía del músico Maurice Jarre –era conocido sobre todo por sus composiciones para films- y le adjudicó una frase que nunca había pronunciado, al menos públicamente. The Guardian y muchos diarios más levantaron la frase que sirvió para dar color a los obituarios. La historia completa está en este link.
El tema es que si el estudiante no hubiese confesado, la cita habría quedado para siempre como algo propio de Jarre. Cuántos ejemplos habrá, que como las buenas falsificaciones de billetes nunca serán descubiertos.
Los defensores de Wikipedia hablan de democracia y libertad. El tema es que no todas las personas tienen la sapiencia o la buena fe para asegurar un resultado de contenidos lo más exacto posible. Desconocemos si hay especialistas para cada tema en Wikipedia, como lo hubo en las grandes enciclopedias del pasado.
Hace casi veinte años comenzó a circular un poema atribuido a Borges, aquel que comienza con Si pudiera vivir nuevamente mi vida/En la próxima trataría de cometer más errores/ No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más…
Algo que está fuera del estilo literario y de vida del extinto Jorge Luis.
El poema se hizo mito y su historia está contada en este link.
Internet es en muchos casos la primera fuente a consultar por periodistas, estudiantes, docentes e investigadores. Para la mayoría del mundo internauta, es la única. La falta de tiempo para chequear, sumada a la ausencia de conocimiento sobre distintos temas conspiran contra la veracidad. La actriz Alicia Bruzzo tuvo en su muerte diez años menos que los que en realidad había vivido, producto de una levantada de material “por boca de ganso” que muchos medios repitieron.
Entre la patinada y el chiste, Taringa tuvo en la semana que empezó el 11 de mayo de 2009 el post más largo de la historia. El motivo, la inclusión como real de la foto retocada de una bandera contraria a la dirigencia de River Plate, colgada supuestamente en el estadio Monumental durante el partido que el local disputó con Lanús. Retocada por un aficionado veinteañero y posteada al blog www. turiver.com.ar, la bandera La peor dirigencia de la historia fue el retoque de un frame capturado de la transmisión televisiva del partido y que en realidad decía La peor defensa de la historia. Siguieron justificaciones gráficas y catódicas, y opiniones de la gente, el diario y el autor de la humorada. Lo peor de todo fue la historia inventada por Olé acerca de la bandera, una verdadera joya de la ciencia ficción y la intención dirigida.
Aquí el pedido de disculpas.
Y aquí, toda la historia en Taringa.
Si internet pone a alcance de todos toda la información, la clave está en cómo buscar, filtrar, seleccionar, aceptar o rechazar la información. Eso lo dijo Humberto Eco, aunque hay quienes se la adjudican a Beatriz Sarlo.
Está todo por aprenderse todavía. Prestar atención para evitar ser arrollado en la supercarretera es una advertencia. Cómo, es el tema.
Te mostramos cómo Raúl Manrupe hizo bailar el tango a las tipografías que uno puede encontrar en la ciudad,
en el blog Chill-Art. Y también su explicación creativa, en exclusiva.
1 comentario:
Creo que es lo mismo de siempre, sólo que multiplicado en millones al acceso al error. Y es una malísima costumbre creer que lo publicado es sagrado. Me explico:
Siempre, desde la invención de la imprenta hasta ahora hubo errores, erratas, horrores, burradas y malas intenciones en las publicaciones. Desde el diario barrial hasta el "prestigioso" diario El País uruguayo, desde un librito de cuentos infantiles hasta las enciclopedias. Y por distintas razones siempre se tendió a creer que lo que estaba escrito era una verdad absoluta. Grave error, claro. Pero ese mito fue perdiendo valor con el acceso a la información, pero no ha sido erradicado. Ahora, cuando todo es tan editable y accesible, las posibilidades de errores e hijaputeces son directamente proporcional al número de usuarios. Pero ojo, de igual manera es fácil de comprobar, corroborar y cruzar información. Es mentira que no haya tiempo, pero es más difícil aceptar que la comodidad y la falta de seriedad en todos los rubros son cosa de todos los días.
Digo, para mí no es preocupante. Siempre tendrán lugar los mediocres y, muchas veces, son los dominantes. Partiendo de esta base, alcanza con no creer en todo como un estúpido, tener una posición crítica y un rigor que pese más que la comodidad de la primera impresión-intención.
¿O alguien cree que las noticias que se daban en la década del ´80 eran todas verdaderas? Y nombro esa década porque la anécdota de la vecina Argentina que transmitía una heroica victoria en Las Malvinas cuando los Ingleses estaban destrozando a sus soldados sin siquiera despeinarse, me parece uno de los casos más terriblemente cercanos del manejo de la información.
Ahh, y yo que usted no creo en una sola de estas palabras, yo que usted...
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